Los guerreros altruistas no son solo cuentos sacados de la cabeza de un inglés.
En el primer libro (o película, pasa en ambas) de la trilogía épica de El Señor de los Anillos, nos encontramos con un grupo bastante diverso de guerreros que, enfrentados al terror más grande que la Tierra Media haya conocido en muchos siglos, se unen como voluntarios a un equipo con una misión prácticamente suicida: llevar a Frodo y al Anillo Único al Monte del Destino para que fuera destruido. Nacía entonces la Comunidad del anillo.
La misión realmente requería un gran esfuerzo: además de enfrentar un recorrido significativamente largo desde Rivendel (donde tuvo lugar el Concilio de Elrond, en el que Frodo se ofreció como voluntario y los demás le siguieron) hasta las entrañas de Mordor, también debían enfrentar los ejércitos de orcos, monstruos milenarios, magos traicioneros, humanos dudosos de unirse a la batalla, y además de eso, a un adicto enganchado al anillo que esperaba cualquier oportunidad para robarles su precioso y asesinarlos.
Han surgido muchas teorías en el fandom en torno a la practicidad de la creación de la Comunidad del anillo. Desde el mal uso de las águilas durante la historia, hasta el desperdicio de los Ents, los sabios del universo Tolkien siempre discuten la viabilidad o no de un plan que dependía de unos pocos enfrentados a demasiados enemigos.
Sin embargo, y a pesar de la polémica que pueda existir al respecto, Tolkien decidió formar su historia en torno a cómo pocos voluntarios lograron salvar al mundo en un trabajo coordinado que requería un gran sacrificio de su parte, pero el mundo nunca hubiese podido salvarse del gobierno cruel y despiadado de Sauron de no ser por ellos.
No tenemos que ser Tolkien para resaltar las ventajas que los equipos de voluntarios de emergencias traen a la sociedad. Los vemos en nuestras propias empresas y, cuando se podía, en eventos masivos. Las personas vestidas de azul y naranja no solo están allí por el bonito uniforme, ellos son la primera línea civil de apoyo ante emergencias en labores como la prevención, formación, socorro y rescate. Y todos son voluntarios. Es decir, todos están allí por altruismo puro y duro.
El altruismo es una capacidad única que mediante hechos y acciones logran hacer del mundo un lugar más seguro, y todo simplemente por vocación de ayuda. ¿No molaría ser lo suficientemente Frodo como para ofrecerte a ayudar a cargar con el mal más grande del planeta, que en el proceso te va a volver completamente loco y enganchado?
Ser voluntario de emergencias no es nada como cargar el anillo único, pero si requiere un esfuerzo extra de tu parte que podría representar menos tiempo para tus juegos, comics, series, películas, anime, o simplemente requerirá que te muevas de tu casa. Sabemos que no todos aquí estaremos dispuestos a eso, pero la demanda de tiempo o el salir de tu casa ya no son excusas para hacer un voluntariado y contribuir positivamente en tu comunidad.
En el verano de 2012 un gran incendio arrasa con casi 50 mil hectáreas en Valencia. Pronto en Twitter inician las peticiones de ayuda ante la crítica situación. Se leen tweets donde aseguran que los bomberos y los equipos de emergencia necesitan voluntarios con motosierras. Dan incluso un número de teléfono. La información es falsa.
En el trágico accidente ferroviario en Santiago de Compostela el 23 de julio de 2013, los bulos también se esparcieron como pólvora. Los tweets virales con información falsa iban desde culpar a una compañía ferroviaria que no tenía nada que ver con el accidente, hasta responsabilizar a organizaciones terroristas para infundir terror entre la población general.
Las consecuencias de difundir información falsa en medio de una emergencia son nefastas. Las personas pueden caer en estafas, o incluso adentrarse en peligros arriesgando su vida, y todo por dar como cierta una información encontrada en internet. La necesidad de prevención y acción inmediata ante emergencias ya no solo debe darse en el sitio donde sucede, sino también online, y es desde allí donde puedes ayudar.
La idea de los Virtual Operations Support Teams (Equipos de apoyo de operaciones virtuales- VOST, por sus siglas en inglés) se crearon desde que Jeff Phillips, director de emergencias de los Ranchos de Albuquerque, en Estados Unidos, hace pública la necesidad de crear una reacción paralela en el campo virtual, para evitar los bulos y, por tanto, más emergencias.
En 2011 la Cruz Roja Americana con sede en Washington pone en marcha un plan piloto de voluntarios digitales, con un objetivo que se ha esparcido al resto del mundo desde entonces, y cuyos principios no han cambiado: ejecutar acciones en redes sociales de respuesta coordinadas ante emergencias para combatir los bulos.
Los voluntarios se organizan para replicar información de las fuentes oficiales, denunciar los contenidos con información falsa, y hacer seguimiento a los nuevos bulos que puedan surgir y compartirlos con la comunidad de voluntarios para así, desde un activismo completamente digital, disminuir las consecuencias negativas que trae la información falsa durante emergencias.
En España surgió precisamente por los incendios del 2012 en Valencia, y desde ahí ha tomado fuerza a tal punto que ya diferentes Comunidades Autónomas tienen sus propias cuentas de voluntariado digital, como las de @VOSTmadrid, @VOSTcatalunya, @VOSTeuskadi, @VOSTGalicia, @VOSTandalucia, entre otras más, así como una cuenta oficial de @VOSTspain.
La explosión de un edificio en Madrid el pasado febrero es una muestra de lo que la coordinación digital de los voluntarios logró, reduciendo la información falsa, y ayudando a viralizar la información contrastada solo de fuentes oficiales, facilitando la labor de los equipos de emergencia en sitio.
Sí no eres un guerrero de la Tierra Media, pero quieres hazañas igual de grandes, únete a los equipos de emergencia digitales VOST, y haz algo bueno por tu comunidad desde la comodidad de tu casa y con tu móvil. La tendrás más fácil que Frodo, pero no por eso tu trabajo será menos importante: evitarás estafas, podrás salvar vidas, y apoyarás la tarea de aquellos que están arriesgando su vida para rescatar a los que están en peligro.
Ya sabéis guerreros altruistas con ganas de hacer algo por el mundo. Entra a Vost España, inscríbete como voluntario, y ayuda a la comunidad que lucha contra los orcos digitales: los bulos. O si te sientes más como un guerrero físico, inscríbete como voluntario en Protección Civil y ayuda en sitio. Y todo sin riesgo de quedarte enganchado a ningún anillo.🌋