Mantener actualizada tu página web no requiere de un gasto y espera constante. Te contamos cómo ahorrar tiempo y dinero en el manejo de tu web.
Nadie reniega las muchas ventajas que una página web da a las pequeñas empresas. Pero no solo basta con tenerla. Tú página web debe ser atractiva, intuitiva, y fácil de gestionar. Un CMS te facilita la gestión de tu web detrás de bambalinas, ahorrando tiempo y esfuerzo a la hora de implementar cambios manualmente.
Conoce otra herramienta que te puede ayudar en el posicionamiento y éxito de tu pyme.
El CMS (por sus siglas en inglés, y como es conocido globalmente) o Sistema de Gestión de Contenidos, facilita la creación y gestión de diferentes formas de contenido en los sitios web de las empresas. También simplifica la forma en que los dueños de sitios web generan y editan los contenidos digitales. Esta plataforma permite cargar muchos formatos de contenido de sitios web para modificarlos posteriormente sin necesidad de tener conocimientos de CSS, HTML o programación.
El CMS te ahorra la contratación de un programador web para configurar tu página y añadir contenido. Resulta muy útil para agregar imágenes y texto. También es una buena manera de agilizar las operaciones de tu web y garantizar que todo el mundo pueda ver el contenido que tú quieres.
Cuando el software no es fácil de usar, se necesita mucho tiempo para averiguar cómo funcionan las cosas. Toda pyme necesita un software intuitivo y que pueda utilizarse sin muchos conocimientos técnicos. Algunos de los software CMS más populares del mercado resultan fáciles de usar para los propietarios de la página y fácil de navegar para los usuarios.
Utilizando temas, se puede modificar fácilmente el aspecto general, el diseño y las funcionalidades del CMS. Con estas opciones se puede cambiar todo, desde el menú y los colores hasta la forma en que su contenido aparece ante los visitante de las páginas.
También puedes utilizar plugins y extensiones para mejorar la funcionalidad de tu CMS. Los plugins son para la seguridad, la gestión de correo electrónico, carros de la compra, compresión de imágenes y otras funciones. Lo mejor es que no requieren conocimientos técnicos ni una instalación engorrosa.
Por ejemplo, algunos negocios son sencillos y sólo necesitan añadir un poco de contenido. En otros, en cambio, querrían crear una tienda online completa con muchos productos. Sean cuales sean tus necesidades, el CMS suele ser lo suficientemente flexible como para adaptarse a tus preferencias y a los requisitos de tu sitio web.
Un CMS permite que varios usuarios colaboren en el contenido y ofrece un único destino para la creación y colaboración. Un diseñador puede subir imágenes y un redactor puede subir blogs al mismo tiempo. El gestor de contenidos web de tu pyme puede entonces comprobar si son coherentes y publicarlos.
Estas plataformas facilitan el acceso de todo el equipo al sitio web. Se pueden utilizar para asignar roles y derechos de acceso en función de tus necesidades. Esto te dará tranquilidad ya que nadie modificará accidentalmente algo que no debería.
Un software CMS te libera de tener que esperar a que un desarrollador web o administrador cambie la página. Tú mismo puede editar rápidamente tu contenido y publicarlo al instante. Todos los cambios se aplican al sitio con un solo clic, mostrando el contenido actualizado en tiempo real.
Los CMS te permiten redactar el contenido del sitio web y programarlo para su publicación. Puedes prepararlo fácilmente con días, semanas y meses de antelación, por lo que no hay que preocuparse por olvidarte de publicarlo en momentos clave. Esto es ideal para tener un calendario editorial de tu web.
Hace algunas semanas te informamos sobre lo vital que es hacer SEO para tu pequeña empresa. Con un CMS puedes tener una biblioteca de herramientas y plugins, incluyendo componentes funcionales para impulsar el posicionamiento de tu sitio web.
Aunque estas herramientas no son lo suficientemente potentes como para sustituir un trabajo de SEO, son útiles para implementar estrategias de soporte que, de otro modo, consumirían mucho tiempo. Además, se actualizan regularmente para ajustarse a los cambios en los algoritmos de los motores de búsqueda.
La mayoría de los sistemas CMS están basados en la nube, lo que significa que se puede acceder a ellos desde cualquier lugar y en cualquier momento si se dispone de conexión a Internet. Esta accesibilidad permite al equipo trabajar desde lugares remotos en todo el mundo. Tu empresa puede tener un gestor de contenidos con sede en Estados Unidos, un diseñador gráfico en España y un redactor en Canadá.
La ventaja de los CMS es que la mayoría de ellos están pensados para ser amigables con los móviles desde el momento en que se instalan. Pero hay que asegurarse de que los temas, plugins y complementos que se utilizan con el software son compatibles con los dispositivos de pantalla pequeña.
La ciberseguridad es una consideración primordial para las empresas que manejan un sitio web. Por eso es vital optar por un CMS con sólidas funciones de seguridad, y es una de las principales ventajas de un sistema de gestión de contenidos.
La mayoría de los sistemas vienen con características de vanguardia incorporados en ellos desde el principio. Sin embargo, algunos otros pueden necesitar añadir componentes adicionales para lograr el nivel de seguridad deseado.
El mantenimiento de un sitio web puede resultar caro. Siempre que quieras modificar tu página, necesitas gastar en el servicio de un desarrollador web, cuyos costes pueden aumentar a largo plazo y puede que pasen algunos días antes de que puedas ver las actualizaciones en tu sitio web.
Como solución, el uso de CMS te ahorra tiempo y dinero. No es necesario pagar a un especialista para hacer pequeños cambios de tu página. Este sistema te permite hacer estos cambios a ti mismo cuando lo desees.